El Santo Padre a ancianas de Castel Gandolfo: «Siguen siendo testimonio de fe y oración»

El Santo Padre a ancianas de Castel Gandolfo: «Siguen siendo testimonio de fe y oración»

Haciendo realidad su propio mensaje para la Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, el Pontífice ha visitado una residencia cercana a su lugar de vacaciones

María Martínez López
León XIV saluda a algunas de las residentes de Santa Marta.
León XIV saluda a algunas de las residentes de Santa Marta. Foto: Vatican Media.

Cuando queda menos de una semana para la Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, el Papa León XIV ha querido subrayar una vez más que los ancianos «siguen siendo testimonio de fe y oración». Así lo ha hecho este lunes, cuando ha roto una vez más su descanso estival para visitar la residencia de ancianas Santa Marta, ubicada en Castel Gandolfo.

Alrededor de las 10:30 horas, el Santo Padre ha llegado al centro, donde ha sido recibido con calidez por la comunidad de religiosas que atiende el centro. El encuentro, tal como recoge Vatican News, ha estado cargado de gestos sencillos y palabras de aliento. 

Como en su visita de la semana pasada al convento de clarisas de Albano, la primera parada de su recorrido por la residencia ha sido la capilla. Allí ha rezado en silencio acompañado por la superiora. A continuación, se ha dirigido al salón principal, donde lo esperaban una veintena de ancianas residentes, con edades comprendidas entre los 80 y los 101 años.

Allí, el Obispo de Roma las ha saludado una por una. Tras escuchar sus palabras, ha compartido sonrisas y bendiciones. A continuación todos juntos han entonado algunos cantos y ha habido un momento de oración común, introducido por el saludo de una joven enfermera. Ha sido entonces cuando el Pontífice ha improvisado unas palabras sobre la conocida escena evangélica de Jesús en casa de Marta y María, que se leyó este domingo.

«En cada uno de nosotros hay algo de Marta y algo de María», ha afirmado. Por ello ha animado a las ancianas a «aprovechar esta etapa de la vida para vivir más como María: escuchando al Señor, cultivando la oración». También ha expresado su profundo agradecimiento por sus plegarias, que calificó como «más importantes de lo que imaginamos».

«La edad no importa», ha añadido. «Jesús quiere acercarse a nosotros, se hace nuestro huésped, y nos llama a ser testigos, sin importar si somos jóvenes o no tanto». Antes de despedirse, el Santo Padre ha rezado junto a las religiosas y las residentes el padrenuestro, y les ha dirigido unas últimas palabras: «Ustedes son signos de esperanza. Han dado mucho en la vida, y lo siguen dando al ofrecer lo que tienen al Señor».

Con esta visita, el Santo Padre ha llevado a la práctica el contenido de su mensaje para la jornada, que se celebra este próximo domingo. En él, exhortaba a «cada parroquia, cada asociación, cada grupo eclesial está llamado» a visitar «frecuentemente a los ancianos».