Los médicos del Papa revelan que «no está fuera de peligro»
Aunque su enfermedad «está contenida», piden «tocar madera» porque, de complicarse, podría derivar en una sepsis. Pasará otra semana ingresado
«El Papa no está fuera de peligro», ha dicho Sergio Alfieri, el médico responsable de la recuperación del Papa Francisco mientras está ingresado en el Hospital Policlínico Universitario Agostino Gemelli de Roma. Durante una rueda de prensa a las puertas del hospital en la tarde de este viernes, el doctor italiano ha pronosticado que Francisco pasará una semana más ingresado.
Alfieri, quien ya ha custodiado la salud del Papa y compartido información con periodistas en ocasiones anteriores, ha explicado en qué consistiría el peor escenario de entre todos los posibles. Hoy por hoy remoto, pero que podría suceder. «Podría pasar que estos gérmenes, localizados en las vías respiratorias, pasen a la sangre. Cualquier paciente tendría una sepsis y, con sus problemas respiratorios y su edad, no sería fácil salvarlo». Es un escenario sobre el que Luigi Garbone, médico del Papa en Casa Santa Marta y también presente durante la rueda de prensa, ha matizado medio segundo después que «está contenido».
Garbone ha dado algún detalle más sobre el diagnóstico del Papa. «Tiene una patología crónica, bronquiectasia», es decir, una dilatación anormal e irreversible del árbol bronquial encargado de conducir el aire desde la tráquea hasta los pulmones. Y se complica por «una bronquitis asmatiforme que puede tener fases de agudización».
Con todo, su compañero Alfieri ha recalcado que Francisco «no está enchufado a ninguna máquina y respira espontáneamente». Solo en ocasiones muy puntuales, si tiene algún episodio asmático, «se conecta a una bombona para tener un poco más de oxígeno». El objetivo a abatir: eliminar los efectos más graves de su enfermedad y gestionar los crónicos en Casa Santa Marta. «Os pedimos tocar madera», ha encargado el doctor.
«El Papa quiere que digamos la verdad»
Según ha narrado Alfieri, «el Santo Padre me ha dicho: “Me doy cuenta de que la situación es grave”». Y ha reivindicado que todas las informaciones que hasta ahora se han compartido en los boletines difundidos por la Oficina de Prensa de la Santa Sede son ciertas porque «el Papa nos ha pedido que digamos la verdad».
Después, preguntado por los periodistas sobre por qué no se ha visto ninguna imagen de Francisco en su sexto día de ingreso hospitalario, ha lanzado esta comparación. «Si mi madre, que tiene 90 años, está en un hospital con una pulmonía bilateral, ¿cómo creen que estará? ¿Quieren ver una foto del Papa en pijama? Respetemos la privacidad de todos». Y ha asegurado que «cuando él se quiera hacer ver, se hará ver y vestido de Papa».
Los médicos también han explicado que Francisco no está encamado y que es pronto para saber de qué modo se producirá el rezo del ángelus el próximo domingo, aunque parece desaconsejable que se asome al balcón de su habitación. Finalmente, han pedido a los periodistas que «transmitáis fotos bonitas del Papa, tenéis muchas y eso le ayudará, y no hagáis fake news».