Ser voluntario, apoyar iniciativas y rezar: tres cosas que puede hacer un católico contra la trata - Alfa y Omega

Ser voluntario, apoyar iniciativas y rezar: tres cosas que puede hacer un católico contra la trata

Según Vicente Martín, miembro de la subcomisión de la CEE contra esta lacra, «no se trata de inventar algo nuevo sino de poner en valor y promocionar lo que se hace»

Rodrigo Moreno Quicios
Vicente Martín es obispo auxiliar de Madrid. Foto: Archimadrid/Jesús G. Feria

El obispo auxiliar de Madrid, Vicente Martín, es uno de los miembros de la Subcomisión Episcopal para la Acción Caritativa y Social de la Conferencia Episcopal Española. También uno de los autores de los materiales de su proyecto social para el Jubileo 2025, que gira en torno a la lucha contra la trata de personas. En conversación con Alfa y Omega, reconoce que «esta es una realidad que desborda», pero en la que los católicos tienen mucho que aportar.

«Los cristianos tenemos que dar razón de nuestra esperanza y debemos hacerlo con la fuerza del amor que transforma», considera. Por ello, más allá de la reflexión, llama también a «crear espacios de esperanza, sobre todo para gente tan rota». Cita los que organizan las entidades que ofrecen apoyo psicológico y formación laboral o las Cáritas. «Se necesitan voluntarios y voluntarias para abrir caminos en sus vidas y acompañamiento y cercanía, pues las han machacado». De hecho, subraya que estos últimos dos elementos son imprescindibles para su rehabilitación porque «la formación no va a tener éxito si la persona no se siente querida».

Una segunda forma de hacer voluntariado es a través de la denuncia y la sensibilización. «Tenemos que tender hacia respuestas globales y promover iniciativas que defiendan la dignidad humana», emplaza Martín, quien llama a «abrir los ojos para conocer situaciones de dolor». Para aquellos que desconozcan los pormenores de esta realidad o cómo concienciar contra ella, explica asimismo que la Conferencia Episcopal «ha creado un dossier donde toman la palabra las propias víctimas» y cuentan lo que han sufrido.

Otra manera en la que los católicos pueden comprometerse contra la trata es sosteniendo los proyectos de instituciones religiosas que ya funcionan. «No se trata de inventar algo nuevo sino de poner en valor y promocionar lo que se hace bien», aclara el obispo auxiliar. A modo de ejemplo, menciona los que ya realizan las adoratrices, las oblatas del Santísimo Redentor, la Fundación Cruz Blanca o Villa Teresita. Según el obispo auxiliar de Madrid, «podemos apoyar estas iniciativas con aportes económicos».

Finalmente, una tercera herramienta de la que disponen los creyentes es la oración. «Hay una Comisión Diocesana Contra la Trata de Personas que está trabajando en esta línea para visibilizar, sensibilizar y llevar esta realidad ante el altar para que el Señor nos abra los ojos y los oídos», explica Martín. En esta línea, el próximo 26 de octubre se celebrará en la catedral de la Almudena una Misa jubilar contra la trata de personas.